18 Oct ¿Por qué Vicente del Bosque es el jefe preferido de los españoles?
Vicente del Bosque es el jefe preferido por los españoles, según el resultado de un estudio realizado por Adecco y en el que han participado a través de una encuesta más de 2.000 trabajadores. En concreto esta era la última pregunta de un cuestionario que giraba en torno a varios conceptos: las características del jefe ideal, si están contentos o no con el que tienen o si desean ocupar ese puesto en el futuro. Pero la buena era la última pregunta: ¿Quién sería tu jefe ideal? Y ahí ganó Vicente del Bosque.
Se nos pueden ocurrir muchos motivos por los que el seleccionador español puede ser considerado un buen jefe. De hecho, la propia encuesta expone algunas características que los españoles consideramos imprescindibles en nuestros mandos y Del Bosque cumple con todas ellas. Sin embargo, no aparece algo que, desde mi punto de vista, le aporta el gran valor diferencial: La ausencia de ambiciones personalistas.
No sé ustedes, pero yo nunca escuché a Del Bosque hablar de sí mismo o vanagloriarse de lo conseguido ¡Nunca! Y eso que tiene logros de los que presumir (jugó, entrenó y ganó en el Real Madrid y en la selección española) y ocasiones para hacerlo (probablemente sea la celebridad que más entrevista concede). Pero jamás se percibe en él ni el más mínimo interés por vender su propia persona. Probablemente lo tenga (todo el mundo lo tiene) pero como gestor de un equipo, como líder que es de un colectivo de profesionales, no permite que aparezca ni el más mínimo atisbo de personalismo en sus declaraciones o comportamientos. ¡Y esa es una de las grandes virtudes de un líder!
Siempre hablamos de lo que debe tener un buen gestor de equipos, pero hay que hablar también de lo que debe despojarse un jefe que ejerza un liderazgo realmente eficaz. Hagamos la prueba y pensemos en aquel jefe que tuvimos –o que tenemos, que hay gente afortunada– aquel por el que hicimos grandes esfuerzos y con el que nos desarrollamos como profesionales. Si lo pensamos bien, los jefes que nos ‘conquistaron’ nos hicieron ‘currar’, nos hicieron sufrir, a lo peor hasta nos hicieron daño… pero sibilinamente nos encandilaron los que se despojaron de su interés personal y nos trasladaron intereses de otra naturaleza, bien colectivos o bien los de sus colaboradores, los que nos permitieron crecer a su lado como profesionales.
Vicente del bosque habla siempre en primera persona del plural y siempre expone los beneficios que obtendrá el equipo o lo bueno o malo que puede ser para el jugador de turno una determinada circunstancia. Pagaría por entrar en el sancta sanctorum de la selección y corroborar que es así también entre bambalinas. Pero no hace falta. Sólo con que públicamente exhiba este liderazgo altruista, despojado de individualismo y enfocado en los demás, ya se convierte en mi jefe preferido.
En estos tiempos de vanaglorias individuales, de las puñeteras marcas personales 2.0 que la gente malentiende y convierte en una sobreventa empalagosa y arrogante de sí mismo. En esta nueva era del individualismo profesional exacerbado, la figura de Vicente del Bosque engancha, encandila y apasiona por ser una perla rara, increíblemente sencillo y elocuente. Por eso es el mejor líder y por eso es el jefe que todos desean. Encima es campeón de Europa y del mundo de clubes y selecciones… Parece que también es eficaz.